¿Hasta qué punto es importante nuestro físico a la hora de recibir un salario? A priori son dos aspectos que podrían guardar poca o ninguna relación, pero parece ser que no es así. Y es que, según Expansión, existen estadísticas “de un nuevo campo académico llamado economía biológica, que pretende hallar una relación entre los rasgos físicos y la retribución económica”.
¿Quiénes ganan más? Cabría preguntarse. Todo apunta que “los altos, los poderosos, los guapos y los que poseen una voz grave cosechan resultados bastante buenos. Los bajos, gordos, débiles y con voz chillona triunfan menos”. En cuanto a la altura, un sondeo de 2005 revelaba que “los consejeros delegados de la lista Fortune 500 eran de media 6,3 centímetros más altos que la media de EEUU. La mayoría de los CEO son muy conscientes de esta ventaja”, se indica en la información.
En cuestión de pelo, “ser calvo no reduce las posibilidades de éxito de un hombre, sino que parece aumentarlas”. Un estudio de la escuela de negocios Wharton señala que “a los ojos de otros hombres, los calvos tienen un aspecto más dominante. También se tiene la imagen de que son más altos y fuertes que aquellos cuyas cabezas están cubiertas por una gruesa mata de pelo».
